AKRIILA fue lanzando desde marzo de este año una seguidilla de singles para ir dando forma a su primer proyecto de gran calibre titulado “epistolares“, un álbum de 30 minutos lleno de distorsión, flow, referencias a la cultura chilena y otaku con auras tiernas, ansiosas y melancólicas. La joven chilena, sin miedo al éxito comparte en estas pequeñas canciones sus más profundas reflexiones y sentimientos.
“epistolares” comienza curiosamente con “debut”: una hermosa y rápida canción con una dosis interesante de Drum & Bass que se extenderá a lo largo del disco. Es un inicio melancólico y energizante que da paso a uno de los reggaetones más increíbles de este año. “epitafio” exclama como leit motiv: hot gays listen to AKRIILA! para establecer de una vez por todas que el potencial futuro de la música urbana y del reggaetón específicamente -con varios exponentes a su alero- será disidente y alejado de la tan tóxica y violenta expresión de heterosexualidad.
La misiva continúa con la participación de Princesa Alba y Broke Carrey cantando “worldw1de”, una emotiva canción sobre el coste emocional de la fama para luego pasar a una insolente, distorsionada pegajosa y otaku canción titulada “NANA フリーク版”, referenciando al manga favorito de las lesbianas y apoderándose de uno de los samples más poderosos y transversales de la música contemporánea: esa batería en loop imparable y deslumbrante, haciendo que la canción se convierta momentáneamente en un pasaje vertiginoso propio del breakcore.
hotxulito.com, junto a Young Cister y POPPER! con TAICHU suenan con un flow impresionante e imparable. La segunda contiene uno de los versos más pegajosos del disco cuando AKRIILA exclama: En su playlist como K-POP Yo soy una POP- lolita pero sigo estando hot.
De aquí en adelante el disco se ve sumergido en una introspección que se siente honesta, desgarradora y liberadora. “mucho, poquito, nada” duele sorpresivamente por fantasear en lo que habría pasado o no al tomar ciertas decisiones en la vida. Se sienten los cuestionamientos de la joven artista por las expectativas de su entorno y cómo le afectan pero concluye que de haber hecho otras cosas, quizás influenciada por los otros, no sería auténtica a sí misma:
“Nunca había esta’o tan mal
Sentir que me voy a enamorar
Pensar que tе voy a encontrar
Saber que tе voy a querer y odiar, y amar y odiar
(…)
Tranquila, ah
Eso me digo a mí misma, solo debo estar tranquila (Solo debo estar tranquila, ma)
No me hago el tiempo suficiente para ver a mi familia
Y en otra vida yo tendría otra vía
Estudiaría cosas que ahora nunca haría
Pero en el fondo me sentiría tan vacía, tan vacía”
Como si no fuese suficiente la cantidad de géneros que ya han sonado, “superficial” deslumbra nuevamente y con otras texturas con su batería y atmósfera inspiradora y tierna. AKRIILA se da la libertad aquí para referenciar a Teleradio Donoso y al Blog de la Feña mientras de fondo el ritmo motiva y alegra, a pesar de que la letra nos transmita un contraste inseguro sobre su autopercepción. “para siempre(｡>﹏<)” es, en lo personal, mi canción favorita del disco: cómo van evolucionando las capas de sonido, aportando espacios tanto contenidos como liberados es deslumbrante, además, el momento en que cantan capas y capas de autotune es simplemente escalofriante. La canción es un aprovechamiento exquisito de los recursos utilizados. Y hablando de recursos exquisitos, “lunes feriadooOoOO” ejecuta magistralmente uno de mis samples favoritos presente en el breakcore y sus subgéneros: el Think Break, esa tiernecita exclamación que parece decir “hey”. Que AKRIILA y su equipo decidan incorporar este elemento es propio de una producción visionaria y atenta a los detalles.
“carta a mi papá” es la encargada de cerrar este mensaje de AKRIILA, un sincero y -me atrevería a decir- intencional acústico desenlace dedicado a su padre. Una misiva llena de sentimientos reprimidos hacia la cuestionable figura de lo que es ser un padre ausente en la sociedad chilena y del cariño que aún permanece en el corazón de su hija:
“Quiero que te sientas mal
Por to’as las veces que tú no has llegado
Me duele quе no herede más
Quе tu apellido y un teclado
Y si me encuentro por tus fotos de Pucón
O de esos viajes por los que tú me has llevado
Te juro que se olvida todo este dolor
Que de pequeña siempre a mi tú me has causa–, ah-ah-ah, ah-ah-ah, -ado.”
epistolares es la prueba de que la música urbana y colectiva tiene un impacto identitario enorme en la cultura latinoamericana, AKRIILA y sus contemporáneos en el género son quienes están imponiendo unas bases interesantes de lo que significa aventurarse en el mundo de la música alejados del negocio turbio de la industria. A lo que se refiere con “hacer música” no es la RAE ni las convenciones sociales conservadoras las que ponen las reglas, sino les propies exponentes de esta escena, porque a pesar de que para el común de la gente o derechamente para el lado más facho del país AKRIILA puede ser “sólo una trapera dentro de ese género lleno de delincuentes”, lo que subyace realmente en su música no es eso, sino más bien un relato de injusticia, machismo, dolor, superación, crítica y diversidad sexual para una juventud generacional llena de heridas y traumas que encuentra alivio y sanación en sus letras.
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